Mostrando entradas con la etiqueta Utopìas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Utopìas. Mostrar todas las entradas

viernes, 27 de mayo de 2011

Utopías de Borrego

 Los amigos (eso asumo) que editan el blog referido en el título, ayer hicieron  uso de una de nuestra columna en el exacto sentido aséptico del periodismo. Es decir, sin aditivo alguno, ni negativo, ni positivo ni neutro. La pura transcripción entre otros trabajos donde denuncian que altos funcionarios del gobierno regional se han mimetizado de rojo-rojito habiendo sido detectados por el inefable Luis Tascón. Me atrevo a exponer un par de comentarios al respecto.
 Personalmente conozco sólo a uno de los tres “infiltrados” que señala el blog, más de vista que de comunicación. Nunca supe que fuera o no chavista. Sin embargo hay gente que firmó contra el Presidente y hasta ministros han sido. Eso no lo vemos mal. Lo grave es que como presume el blog se hagan pasar por chavistas y enfilen baterías contra otros “coleados” o presuman de ser impolutos. El Presidente ha dicho que en este país cabemos todos y debería ser cierto. Aunque cuando algo lo enerva predica lo contrario y crea confusión en el sujeto pasivo. El país es Venezuela y en ella podemos cobijarnos tirios y troyanos. Gente que nazca aquí y otros que vengan de fuera con sanas intenciones. Después de más de doce años de gobierno chavista deberíamos haber practicado lecciones de fraternidad y de solidaridad venezolanista.

 Muy poco se ha hecho. Si una persona se siente idónea puede ofrecer sus servicios al país sin cortapisa alguna. No necesita color político. No requiere plataforma partidista. Y esa libertad de criterio fue uno de los mensajes que más impactó de Chávez en 1998. La Venezuela sin exclusiones, que no significa apañar desviaciones. El país unificado en función de un mejor futuro. La Nación ideal para apostar al destino democrático.
 Y la República como la mejor plataforma de un Estado sin desigualdades sociales más allá de las que se producen por combustión espontánea de la realización del trabajo y el empeño por ser productivos. Una tierra donde “cachicamo no trabaje pa´lapa” y que el que siembre su pilón que se coma su maíz. Cero alcahueterías.

De la mesa de trabajo del periodìsta José Ángel Borrego