Políticos estadounidenses se
sumaron este viernes a una campaña internacional para exigir al presidente
Barack Obama que congele las cuentas bancarias y suspenda las visas de viaje a
Estados Unidos de funcionarios del gobierno venezolano.
Las declaraciones de los
funcionarios tuvieron lugar ante una concurrida audiencia venezolana que se
acercó a escucharlos y a pedir libertad y democracia para su país en un
restaurante de Doral, ciudad vecina de Miami conocida también como "La
pequeña Venezuela" por la numerosa comunidad de ese país que reside aquí.