Entorno inteligente. La Red de Sociedades Científicas Médicas de Venezuela emitió una nota especial para advertir sobre la riesgosa presencia de chipos en comunidades de Anzoátegui. La advertencia se basa en estudios realizados por Antonio Morocoima, investigador parasitólogo de la Universidad de Oriente, que han confirmado la transmisión activa de la enfermedad de Chagas en Anzoátegui en los últimos años pero que "no han sido tomados en cuenta suficientemente por las autoridades de salud regionales y nacionales", según la nota emitida por la red y firmada por los médicos Ana Carvajal, José Félix Oletta y Saúl Peña. Los chipos utilizan las palmas y cocoteros, abundantes en la zona, como hábitat extradomiciliario. 
De las 22 especies de chipos presentes en Venezuela, siete se encuentran en Anzoátegui. Además, se han encontrado dos nuevas especies de estos insectos, Eratyrus mucronatus y Panstrongylus rufotuberculatus, que son silvestres pero que, debido a la deforestación y a la quema de sus reservorios naturales, han migrado en la búsqueda de nuevas fuentes de alimentos y han ingresado en las viviendas. "La presencia de vectores en las zonas urbanas indica fallas en la continuidad de los programas de control y vigilancia necesarios para la erradicación de la enfermedad de Chagas", explican la nota de la Red. Durante el periodo 2002 al 2009 se realizaron visitas diurnas y nocturnas a caseríos de diferentes municipios de Anzoátegui, recolectándose 3.379 chipos, de los cuales 70% presentó la infección natural por el parásito que transmite la Enfermedad de Chagas Trypanosoma cruzi.
