La delincuencia sigue sembrando
temor entre los habitantes de la capital del municipio Juan Antonio Sotillo.
Diariamente, propios y visitantes son víctimas de arrebatones
Puerto La Cruz.- Para vivir en el
casco central de Puerto La Cruz hay que armarse de paciencia. En las afuera de
los negocios ubicados en las vías principales, desde hace varios meses no cesan
las colas, como tampoco en las paradas públicas. Caminar por las aceras es casi
imposible porque los tarantines que colocan los buhoneros ocupan la mayor parte
del espacio.