Habitantes del municipio Carvajal protestaron en la sede de
Polianzoátegui para pedir la destitución del comisario Pablo Quintero y
sus oficiales,
Valle Guanape.- En una guerra campal se convirtió
una manifestación que iniciaron los vecinos de Valle Guanape frente a
la sede de la Policía de Anzoátegui (Polianzoátegui) para exigir la
destitución del comandante Pablo Quintero y los funcionarios a su cargo.
Como
consecuencia de varios sucesos ocurridos durante los últimos meses en
la capital del municipio Carvajal, este lunes familiares, amigos y
conocidos de las víctimas decidieron exigir respuestas al organismo de
seguridad.
A las 9:00 am, parientes y excompañeras de trabajo de
la docente Mariana Coromoto León Armas, asesinada el viernes pasado
supuestamente por su expareja José Antonio Castillo, solicitaron al
comisario enviar a los oficiales a una zona donde, al parecer, se
esconde el presunto criminal.
Aparentemente, el funcionario alegó que carecía de personal para buscar al individuo.
La respuesta caldeó los ánimos de los vecinos, quienes pedían la destitución de Quintero.
En las paredes escribieron mensajes que señalaban a la autoridad policial como parte del problema de seguridad en el municipio.
Posteriormente
produjo un enfrentamiento entre los civiles y los uniformados. De un
lado lanzaban piedras y de otro perdigones.
Cuando intentó salir del perímetro, el comisario Quintero fue atacado por una turba a golpes y puntapiés.
El
jefe de la Coordinación Policial de Píritu, Audecio Colmenares, ordenó
el traslado de los 32 oficiales adscritos a Valle Guanape a la
comandancia de la zona 3. Informó que asignará nuevo personal para esta
jurisdicción.
A su juicio “la violencia no es un modo para pedir
justicia. Ellos arremetieron contra una institución que también les
pertenece”.
Sin respuestas