Expediente
Público. Los atribulados habitantes del centro porteño tendrán que recibir el
año nuevo en medio de aguas putrefactas, producto de la falta de mantenimiento
de brocales y de la existencia de edificaciones no aptas para ser
habitadas y que mantiene familias enteras en situaciones precarias.
El caso que nos
denuncian vía mensajería refiere al colapso del sistema de aguas servidas que
mantiene el antiguo edificio del “Hicopacabana”, en pleno centro porteño y
cuyas aguas fecales corren libremente por las avenida 5 de Julio hasta llegar
al brocal obstruido localizado a pocos metros de la recién inaugurada
megatienda Traki.
Este problema
mantiene al borde la paciencia de residentes del sector quienes aseguran que “pese
a haberle hecho el llamado a las autoridades de la alcaldía socialista del
municipio Juan Antonio Sotillo no han resuelto el problema y ni siquiera hacen
su trabajo de mantener limpias las bocas de visita”.