Concluyeron las elecciones presidenciales en Venezuela, con la
victoria de Hugo Chávez sobre Henrique Capriles, y esta es la nota que
publica BBC Mundo.
Para más de la mitad de los electores venezolanos es un día de
celebración, pero para quienes votaron por el candidato que perdió es
momento de sinsabores. ¿Qué pasa exactamente con el estado de ánimo de
los derrotados después de unas elecciones? ¿Es realmente “el fin del
mundo”? ¿O las cosas no son tan extremas?
En Estados Unidos, la decepción postelectoral tiene incluso una
denominación específica como trastorno: Síndrome de Estrés Traumático
Postelectoral (PESTS, por sus siglas en inglés).
¿En qué consiste este síndrome?
Los expertos aseguran que, tras la derrota de su candidato preferido,
una persona puede sentirse invadida por una suerte de desánimo ante la
vida, falta de confianza en las instituciones electorales, cierta
indignación o rabia, y también apatía.
Son emociones que, pese a que pueden parecer contradictorias, se combinan al mismo tiempo.
Además, quienes están más implicados en el devenir político de su
país, pueden caer en un proceso de desorientación severa. Surge para
ellos la necesidad de rodearse de personas que piensen igual y sienten
el temor a que el país se venga abajo.
Algunos psicoanalistas van más allá y comparan el síndrome
postelectoral con la sensación de tristeza colectiva tras una tragedia.
Sin embargo, en el caso de las elecciones, se da la particularidad de
que mientras una parte de la sociedad está de duelo, la otra está
triunfante.
La desconexión entre la tristeza y el trauma de la mitad del país y
la sensación de victoria moral de la otra mitad agrava la depresión de
quienes fueron derrotados, que inevitablemente son testigos de la
celebración de los vencedores, ya sea por sus manifestaciones de júbilo
en las calles o por la proliferación de mensajes y reacciones en redes
sociales como Facebook y Twitter.
Esto hace que, a menudo, los perdedores recurran a la acción
inmediata y emprendan actividades de protesta, sobre todo en el caso de
países polarizados o cuando el resultado electoral es muy ajustado.
Síndrome postelectoral
El concepto de Síndrome de Estrés Traumático Postelectoral fue
acuñado en