La rotura de una tubería petrolera ubicada debajo del puente de Tascabaña, comunidad indígena del municipio Freites, causó un desastre ecológico en esta localidad. El crudo se esparció por gran parte del cauce que desemboca en el río Guanipa, informa
El Tiempo.
Esta situación tiene alarmados a los vecinos de Tascabaña I y II, quienes temen por el futuro de sus cosechas y del ganado que se alimenta del riachuelo que alcanza una extensión de siete kilómetros. Desde el jueves, con camiones vacuum tratan de sanear el lugar.
Al parecer, el escape del hidrocarburo se inició hace dos semanas, pero fue el miércoles 22 de febrero, cuando el edil Benito Machuca, presidente de la Cámara Municipal de Freites, tuvo conocimiento del caso. “Cuando lo supe, me comuniqué con varios habitantes para que tomaran las previsiones y avisaran a Pdvsa, a fin de evitar que el petróleo llegara al río Guanipa y perjudicara los cultivos”.
El concejal aseguró que no es la primera vez que ocurren derrames en las comunidades indígenas de Freites. En Kashama, Bajo Hondo, las cabeceras del río Guanipa y por el Macarapana (hace siete años) también se han registrado, y según afirmó, las consecuencias permanecen.
Trámites
Mientras Machuca le declaraba este viernes a El Tiempo desde el puente, en la sede de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) San Tomé estaba el gobernador de Tascabaña I, Zail Martínez, quien acudió en busca de solución al problema y para solicitar que les permitieran a los miembros de la comunidad participar en el saneamiento del río. A las 9:10 am llegó al lugar el primer vacuum de una empresa de servicios. 40 minutos más tarde arribaron dos unidades más. También acudió un representante de la industria petrolera, quien dijo no estar autorizado para declarar, pero que estaban trabajando en la limpieza.
El Tiempo hizo un recorrido por el sitio, con el residente Miguel Ávila, quien introdujo una rama en el río para mostrar que el crudo tomó profundidad. A la vez, enseñó un pez muerto que estaba a la orilla del riachuelo. “A nosotros nos cayeron las siete plagas de Egipto”, dijo Ávila.
En horas de la tarde, vía telefónica, el gobernador de Tascabaña I, Zail Martínez, destacó que en la reunión con representantes de Pdvsa logró que aceptaran a 10 miembros entre las dos comunidades kariñas, para que laboren en el saneamiento del río.
Según su percepción, el derrame del crudo se extendió más de 200 metros, por lo que estima que la limpieza dure alrededor de un mes. “Vendrán otros trabajadores para el saneamiento. Ojalá esto se controle rápido, para evitar males mayores”.
Suministro
El gobernador de Tascabaña I, Zail Martínez, precisó que Pdvsa enviará cisternas a la comunidad mientras el río es saneado. El edil Benito Machuca acotó que hace años le solicitaron al holding unas lagunas artificiales para que el ganado se alimentara, pero no hubo respuesta.
1.500 habitantes
hay entre Tascabaña I y II. Los pobladores tienen cinco años padeciendo por los escapes de gas provenientes de 50 pozos y que por más de 40 años han estado inactivos. Pdvsa les notificó que se trata de la fuga natural de los gases de la tierra.